Tantra / Deseo

Las palabras tantra y deseo tienen significados similares.  Un significado
del tantra, una palabra encontrada repetidamente en los textos antiguos de la
India, es “expansión lejos de la crudeza o expansión lejos de lo que es
estático”. El ‘deseo’ puede fácilmente entenderse con el significado de
“anhelo de expansión.”  El deseo sin objeto, el deseo
desmotivado, el deseo puro, el anhelo de lo ilimitado es la Divinidad.
 Durante siglos, el deseo ha sido menospreciado y ridiculizado como
“la raíz de todos los males”, pero en realidad es la raíz de todo lo
que hacemos.  Nombrar el deseo como mal es estar en contra de todas
las criaturas del cielo y de la tierra.  La energía que canalizamos en
todo deseo es estar enfocada y transformada.

 

INMENSURABLEMENTE
CERCA

El tantra tiene una larga y rica tradición de hacer justamente eso, enfocando y
persuadiendo a la mente humana para entrar en el lugar de quietud desde el cual
es posible acceder más allá de la capa del “Yo y Mío”.
 Podría decirse que el primero y más importante de nuestros deseos es la
energía sexual.  Mirando de cerca verás que la energía sexual es la
energía creativa del universo.  En la mayoría de las formas de vida,
esta energía se expresa solo a través de la creatividad biológica, la
reproducción y la evolución de la especie.  Pero en los seres humanos esa
energía creativa es responsable de la gran poesía, la Capilla Sixtina, la
Catedral de Notre Dame de París; cada vez que te sientas feliz, apasionado o
entusiasta, es una experiencia de energía sexual.

En toda la India se pueden ver estatuas que representan a un hombre y una mujer en
un abrazo sexual, indicando una intimidad entre las dos mitades del campo de
energía consciente que habita el universo; masculino y femenino.  Esta
es la interpretación prevista para estas estatuas.  El tema de la
intimidad es uno que distingue al tantra de muchos otros puntos de vista
espirituales del mundo.  Este sentimiento ha sido representado por
innumerables canciones y poemas de Santos y maestros a través de los
siglos;

“No entendí antes qué tan cerca estás de mí”, “Estás mezclado en el
trabajo como la melodía está mezclada en la canción.”

 

LA
DANZA DE RADHA

Estas dos mitades reciben comúnmente los nombres de Shiva (masculino) y de Shakti
(femenino), aspectos cognitivos y operativos del campo de la energía.  También
como, Radha (femenino) y Krshna (masculino). La energía creativa que
yace dormida como energía psico-espiritual, en la base de la columna vertebral
de cada ser humano, se despierta en actos de creatividad, inspiración y
originalidad.  La práctica de meditación es un esfuerzo para elevar
esta energía (Radha) por la columna vertebral y, al hacerlo, se une con la
consciencia pura (Krishna) que reside en la parte superior del cráneo.
 Cuando uno practica meditación en un momento particular del día, la
energía asciende por la columna vertebral y cuando uno deja de meditar baja, a
veces a esto se le llama la “danza de Radha”.

Este acto de unión entre Radha y Krishna, Shiva y Shakti tiene lugar tanto en el macrocosmo como en el microcosmos.  (mira el artículo, “El Viaje de la Consciencia y el Nacimiento de la Espiritualidad”)  Esta es la ciencia intuitiva del tantra, presente en muchas tradiciones espirituales.  ¿Cómo apreciar esto?  Ha sido un secreto a voces durante miles de años en las enseñanzas del tantra yoga.